By Joan Spínola -FOTORETOC-

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Villa de Guadalcanal.- Dió el Sr. Rey D. Fernando a Guadalcanal a la Orden de Santiago , e las demás tierras de la conquista, e de entonces tomó por arma una teja o canal, e dos espadas a los lados como así hoy las usa.



miércoles, 31 de julio de 2013

Funciones y Ámbitos de la Real Audiencia


Las Reales Audiencias de Extremadura

El nombre de Extremadura comienza a fraguarse en tiempos remotos. Tiene su origen en la Reconquista significando zona fronteriza. La provincia surge jurídicamente en torno a 1653 como suma de grandes consejos con multiplicidad de poder repartido entre el Rey, los señores de la nobleza, los titulares de las Encomiendas de las Órdenes Militares y autoridades eclesiásticas.
Será en 1785 cuando por Real Orden de 22 de marzo se conforme formalmente la provincia de Extremadura con 8 partidos o subdelegaciones de rentas, consecuencia de la división de España por intendencias, concebida por Floridablanca.
Por otra parte, en 1775, las ciudades de Badajoz, Mérida y Plasencia y la villa de Alcántara, en representación de la región, acuden al Consejo de Castilla para solicitar la creación de una Audiencia en Extremadura que acabase con los agravios y perjuicios que suponía para los extremeños acudir a las Chancillerías de Valladolid y Granada.
Aunque la idea fue de Carlos III que dio el visto bueno en 1776, sin embargo, será creada por Carlos IV mediante Pragmática Sanción en 1790. Se estableció en la ciudad de Cáceres y tendrá como sede el lugar que antes ocupó el Hospital de la Piedad. El 27 de abril de 1791, se inauguraba la Real Audiencia de Extremadura con un solemne ceremonial y un discurso a cargo de Juan Meléndez Valdés.
Entre los factores que determinaron la creación de esta Audiencia estaban no sólo los problemas derivados por la lejanía de los Tribunales que dirimían los litigios de los extremeños, obligados a recurrir a las Chancillerías de Valladolid o Granada en función de la línea divisoria marcada por el Tajo para delimitar sus respectivas jurisdicciones. También influyeron factores socioeconómicos (conflictos con la Mesta, problemas con el contrabando o los problemas derivados del campo extremeño.

Interrogatorios.-
"Pocos meses después de su constitución, antes de que empezase a actuar, el 24 de enero de 1791, en cumplimiento de Real Orden del Supremo Consejo de Castilla, el regente dispuso que cada uno de los 8 ministros realizaran una visita a cada uno de los partidos que formaban la entonces llamada provincia de Extremadura. A tal fin se elaboró un interrogatorio de 57 preguntas, que habrían de contestar los justicias, párrocos, Ayuntamientos y personas particulares de los distintos pueblos de cada uno de los 8 partidos que componían Extremadura. La encuesta tenía como objetivo conocer mejor el territorio sobre el que se habrían de aplicar las reformas económicas, sociales y administrativas, haciendo más patente la autoridad real y el progreso tal como lo entendían los ilustrados, promoviendo el desarrollo agrícola, favoreciendo las comunicaciones, aumentando la población y en último término arrancando a la provincia del atraso y la tradición en que se encontraba, con particular interés por los problemas de la educación pública, preocupación constante de los ilustrados".
La necesidad de adquirir noticias exactas sobre su población y riquezas y de todos aquellos factores físicos, políticos, fiscales, culturales o sanitarios para poder llevar a la práctica una política más eficaz determinó que la Real Audiencia de Extremadura pusiera en marcha toda su burocracia.
La Real Audiencia de Extremadura, con fecha 14 de abril de 1829, remitió a todas las poblaciones de su distrito dos instrucciones encaminadas a establecer la división y arreglo de las alcaldías reales, ayuntamientos y corregimientos. Uno de los apartados del interrogatorio consistía en especificar qué vecindario tiene el pueblo y qué número de almas, en comprobación acompañarán testimonio del padrón que se habrá formado en el corriente año, con distinción de eclesiásticos, nobles, militares, jornaleros, viudas y demás clases, el cual se firmará por la justicia, concejales y escribano o fiel de fechos del ayuntamiento.
 Composición.-La plantilla la formaban el regente y 8 oidores o ministros y 1 fiscal, amén de 4 relatores, 6 receptores, 4 escribanos, 6 procuradores, 4 alguaciles y 3 porteros".
Funciones.-Conocían de los juicios civiles y criminales, excepto los de fuero eclesiástico, militar o mercantil. Sus fallos podían apelarse ante el Consejo de Indias (siempre que se tratase de asuntos por más de 6.000 pesos de oro). Conocían del recurso de fuerza, es decir, la reclamación de los agraviados por los jueces eclesiásticos, que procedía en caso de incompetencia de éstos para conocer de las causas, inobservancia de las normas que regían los juicios eclesiásticos y en las negativas de apelación que eran procedentes. Conocían de las contiendas de competencia entre jueces laicos y eclesiásticos. Conocían de algunos juicios eclesiásticos y los juicios de encomiendas. Podían dictar auto acordados, para una adecuada administración de justicia, pudiendo con ellos suplir los vacíos normativos en cuanto a los procedimientos o para interpretar las normas procedimentales vigentes. Se encargaba no sólo de administrar Justicia, sino que tenían otras funciones de carácter gubernativo. Para ello era imprescindible el conocimiento exacto de la situación demográfica, económica y social del territorio en el que estaba establecido.
Por ello la importancia de los llamados "Interrogatorios".

Ámbito de Actuación.-
El ámbito de su competencia se extendía, de este a oeste, de la línea del reino de Toledo hasta Portugal y, de norte a sur, por el puerto y sierra de Baños a los límites de Sierra Morena. Además de sobre los municipios de Extremadura, también tenía competencia sobre algunas. 

Documentación Generada.-

Además de documentos textuales generados en los procesos judiciales se conserva un amplio repertorio de documentación cartográfica y planimétrica que podemos clasificar en 2 tipos fundamentales:

s, división y arreglo de las alcaldías reales, ayuntamientos y corregimientos que tuvieron lugar en el periodo comprendido entre 1791 y 1829. como documentación de la fase de prueba de los procesos, especialmente en procedimientos de deslinde de la propiedad o la posesión. El interés de estos documentos es evidente como fuente para estudiar la evolución del territorio y del estudio del proceso de realización de la cartografía. 
Fuente: www.celtiberia.net

domingo, 28 de julio de 2013

Pensamiento y mayonesa


La mala conciencia  

Decir que Rafael Chirbes maneja con excelencia el lenguaje es desmerecerlo: En la orilla es un ejercicio de vivisección sociohistórica y espeleología moral, en el que la consistencia de una prosa a ratos onettiana engulle a los lectores como la arena movediza del territorio pantanoso que forma parte del escenario de la historia: obra abandonada, luz que duele, materia orgánica que huele a podrido. El paisaje de esta novela opera como correlato de una generación que renunció a los sueños en favor de la voracidad. Chirbes escribe a través de un narrador cuya desesperanza y mala conciencia reflejan su doble condición de víctima y verdugo. La mala conciencia es el estigma de esos españoles que hoy rondan los setenta años y que quizá se preguntan qué pudieron hacer y no hicieron. O al revés. Chirbes no habla de la maldad como abstracción —no huye: el horror está aquí mismo— y define un punto de vista moral que se remata en un actualizado ubi sunta la manera de Las coplas a la muerte de su padre. El paisaje es la Historia cristalizada en la naturaleza y, a su vez, cada personaje es la concreción en un cuerpo de la Historia. Este es el libro de una sociedad que, como la carne, se corrompe, agoniza y muere; la de un individuo que no puede entenderse más allá de la comunidad que lo construye: la de la utopía, convertida en distopía, del “todos ricos” de Felipe González, la de lo light —pensamiento y mayonesa— y la veladura interesada de violencia y desigualdad.
La pobreza se opone a la voracidad expresada a través de sus metáforas: comida, sexo, dinero... Uno es lo que come, pero también dónde y con quién lo come, porque la esencia no basta y, entre lo hortera y lo glamuroso, lo ostentoso y lo estentóreo, es necesario exhibir y a la vez camuflar la sangre de los mataderos con la limpieza hipócrita de una pechuga envuelta en papel film. Las representaciones de En la orillaremiten a un imaginario barroco —los humanos rebañan calaveras de animales—, reactivado en la iconografía de Soutine o Bacon, que resulta pertinente en una novela escatológica y materialista. Un bodegón. Principio y fin, amor y muerte, el alimento y lo fecal, ejemplifican un materialismo casi sacralizado. En la orilla podría ser un título de connotación religiosa: límite que se traspasa o se confunde, trascendencia y labilidad, canción de misa. El sentido del humor de Chirbes es sutil. Como su ternura: los perros abandonados, atropellados, torturados son también el calor que se transmite a las yemas, afecto y vulnerabilidad. La dependencia como palabra clave de este relato.
El sustrato literario y político que desencadena la escritura de Chirbes no descansa en la ética socialdemócrata de las buenas palabras. El retrato de las relaciones familiares, afectivas y laborales, como manifestaciones de la corrupción social y del absurdo inmanente al hecho de existir; el desmantelamiento de una carpintería contado desde la voz de un patrón que se niega a que sus asalariados le echen en cara sus cuentos de la lechera, pese a todo su pesimismo, no configuran un relato escéptico: no se toma la palabra para ejercer una catarsis, sino para sacar la desolación a la plaza pública y que esa desolación sea un acto. Chirbes se inscribe en la olvidada estética de los Max Aub del mundo y comparte, de algún modo, el marxismo, poético y cruel, de los que vivieron la guerra en primera persona: generación de la derrota y la bilis, pero también de esa lucidez del aguafiestas que tanto incomoda a los de las burbujas y la pechuga envuelta en papel film. La de los sofisticados catadores de vinos. La lucidez del aguafiestas se clava como astilla en la córnea del lector que busque amabilidades en la literatura. Esta lectura no es amable, sino imprescindible.

MARTA SANZ

miércoles, 17 de julio de 2013

Real Audiencia de Extremadura y Guadalcanal 4

Guadalcanal en 1829
Final artículo


En el resto de calles abundaban los labradores y sobre todo los jonnaleros, si bien existían también artesanos, como un oficial de cuchilla, un albaldonero (fabricante de las albaldas de los asnos), y un fabricante de jabón (en 1791 la fabrica estaba situada en la calle Camachos, y ahora en la calle Valencia), así como un tambor de voluntarios, un director de minas y dos organistas, que posiblemente trabajasen juntos, pues no se ha registrado la dotación de un follador (el que accionaba el fuelle del órgano).La aldea de Malcocinado, sujeta al corregidor y al Ayuntamiento de Guadalcanal, contaba con 82 vecinos, 26 de Los cuales eran labradores y 46 jornaleros. También había cinco viudas, un hortelano, el eclesiástico don José Cisneros, un barbero, un alarife y un herrero. Se trata de una aldea eminentemente agrícola y ganadera donde el 88% de los vecinos se dedicaba al sector primario. Por su parte, en Guadalcanal hay un total de 575 jornaleros, que representan el 52'17% del vecindario, y 167 labradores (15'15%). Se informa que el pueblo vive de la labor (trigo, cebada, centeno, garbanzos, habas, lino, vino), de la ganadería (cabras, vacas, cerdos, caballos, carneros, colmenas) y de los plantíos de olivar. Por desgracia, el interrogatorio de 1829 no ofrece más detalles de las actividades económicas. Si destaca la existencia de trece molineros, un número nada despreciable en esta época en comparación con otras poblaciones. No se aclara si se trata de molinos de aceite, pan o zumaque pero, teniendo en cuenta la extensa zona de olivar, podemos deducir que la mayoría podían ser de los de primer tipo.
En relación a las personas de noble alcurnia, encontramos un total de 33 hidalgos, entre ellos cuatro viudas y una soltera, que representan el 3% de los vecinos. En general, el porcentaje de viudas era elevado: por cada cien vecinos se anotan siete (en total, 77). Por su parte, las solteras que eran cabeza de familia representan el 0'9% de los vecinos (10 en total), y curiosamente se localizan en las calles más céntricas. ¿Solteras ricas que, por tanto, no precisaban del matrimonio?.

FUENTES.- Archivo Histórico Provincial de Cáceres, secc. Real Audiencia, Ig. 573: vecindario de Guadalcanal de 1829. Archivo Histórico Municipal de Guadalcanal, Ig. 335: padrones de habitantes de 1800 a 1867.

BIBLIOGRAFIA.-MALDONADO FERNANDEZ, M. "El termino de Guadalcanal desde su origen hasta finales del Antiguo Régimen", Revista de Feria y Fiestas, Guadalcanal, 2002, pp. 111-131. RODRIGUEZ CANCHO, M. y BARRIENTOS ALFAGEME, G. (Eds.): Interrogatorio de la Real Audiencia. Extremadura a finales de los tiempos modernos. Partido de Llerena, Mérida 1994, pp. 127-166.

Para concluir mostramos un listado con todas las profesiones y situaciones sociales:




 
 
 
 
 
 
 
Profesionales y
Total
(+) A
(+) B
(+) C
(+) D
% de Total
Grupos sicuales
 
 
 
 
 
 
Molineros
13
4
1
1
1
1,18
Regatneros
3
 
2
 
 
0,27
Arrieros
36
2
 
1
2
3,27
Labradores
167
13
3
3
4
15,15
Jornaleros
575
27
3
7
10
52,18
Zapateros
26
7
3
1
6
3,36
Carpinteros
11
 
1
6
1
1
Hortelanos
19
1
1
3
3
1,72
Médicos
2
 
 
 
1
0,18
Boticarios
2
 
 
1
 
0,18
Organistas
2
 
 
 
 
0,18
Director de Minas
1
 
 
 
 
0,0009
Sacristán
1
 
1
 
 
0,0009
Tambor  voluntarios
1
 
 
 
 
0,0009
Tejedores
4
 
 
 
1
0,36
Fabricante de jabón
1
 
 
 
 
0,0009
Eclesásticos
21
4
1
5
5
1,9
Posaderos
3
1
2
 
 
 
Alarifes
18
2
1
3
1
0,27
barberos
7
1
 
 
1
3
Escultor
1
 
 
1
 
0,45
Cirujano
1
 
 
1
 
0,0009
Chocolateros
3
1
1
2
 
0,27
Herreros
12
 
 
 
1
2,09
Herrador
0
 
 
 
 
0
Tesorero Minas
1
 
1
 
 
0,0009
Estanqueros
2
 
 
 
 
0,18
Tenderos
1
 
 
1
 
0,0009
Sastres
4
 
1
1
1
0,36
Escribanos
2
 
1
1
 
0,0009
Abogados
1
 
 
 
 
0,0009
Albardero
1
 
1
 
 
0,0009
Oficial de cuchilla
1
 
 
 
 
0,0009
Mercaderes
2
 
 
 
2
0,18
Administrador rentas
1
 
 
 
1
0,0009
Viudas
77
6
4
 
4
7,99
Solteras
10
 
3
 
1
0,0009
Hidalgos
27
 
1
 
2
3,45
Viudas  cond. Hidalga
4
 
 
 
 
0,36
Solteras cond. Hidalga
1
1
 
 
 
0,0009
 
 
 
 
 
 
 
(+)
 
 
 
 
 
 
A= Calle Camachos
 
 
 
 
 
 
B= Plaza y calle Mesones
 
 
 
 
 
C= Calle San Bartolomé
 
 
 
 
 
D= Calle San Sebastián
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Por Ana Murillo López
Crónicas de Guadalcalanal
Revista de Feria de 2004