By Joan Spínola -FOTORETOC-

By Joan Spínola -FOTORETOC-

Villa de Guadalcanal.- Dió el Sr. Rey D. Fernando a Guadalcanal a la Orden de Santiago , e las demás tierras de la conquista, e de entonces tomó por arma una teja o canal, e dos espadas a los lados como así hoy las usa.



miércoles, 29 de septiembre de 2010

GUADALCANAL TIERRA DE OLIVOS



ACEITE, EL ORO VERDE



Existen varias hipótesis sobre el origen del olivo, pero hay dos que parecen de los estudios efectuados que son más reales, una que postula que proviene de Oriente Medio, de las costas bañadas por el Mediterráneo de las actuales Siria, Líbano e Israel y otra que considera que lo situa originario de Asia Menor.
La llegada a Europa probablemente tuvo lugar de mano de los Fenicios, en transito por Chipre, Creta, e Islas del Mar Egeo, pasando a Grecia y más tarde a Italia y a la Peninsula Iberica, aunque fueron posteriormente los árabes los que impulsaron su cultivo en Al Ánadalus, teniendo el aceite, junto con el vino y los ceralales como uno de los principales productos en sus trueques.
De esta época proviene el nombre del aceite obtenido de sus frutos, que etimológicamente proviene de la palabra árabe “az-zait”, que quiere decir el jugo de la oliva, ha servido durante siglos como alimento, materia prima para alumbrado, ungüento curativo medicinal, y líquido revitalizador del organismo humano.
Por tanto, el cultivo del olivo en la Península Ibérica y por extensión en Andalucía data de los tiempos de los Fenicios y Griegos en el siglo VIII antes de nuestra era, consecuentemente y teniendo en cuenta que estos pueblos llegaron por el Mediterráneo unido a que la orografía y clima de nuestra zona era optima para el olivo, se puede suponer que las primeras plantaciones y explotación de la aceituna en Guadalcanal se pudiese remontar a ese período.
No obstante, las primeras referencias que se tienen del aceite de la zona fue en la ocupación romana, aun cuando el cultivo principal y mas apreciado de la región era la vid, de los que se obtenia los afamados vinos de la época, es sabido que por aquí pasaba una calzada romana por la margen derecha del arroyo del Arco, atravesando por nuestro termino la vía romana que conducía y aprovisionaba desde Híspalis a Emerita todo tipo de mercancías a su ciudades, los romanos fundaron el asentamiento de Sisapo, posteriormente llamado Canalía, muy cerca de donde hoy se encuentra la actual villa.
Fue en el siglo XVI y por Real Ordenamiento de Carlos V cuando se normalizó el cultivo del olivo en la zona; Encontrándose el monarca en Burgos, el 23 de Diciembre de 1527, envió un ordenamiento al Gobernador de Llerena, observando el monarca la escasa producción de aceite que tenia la provincia Santiaguista de León en esta zona y teniendo en cuenta la excelencias del terreno y el clima, la buena disposición que estas tierras tenían para dicho cultivo, sería de obligado cumplimiento su voluntad en el mínimo plazo posible.
El traslado de estas ordenanzas fue consumado por el escribano de Cámara de Su Majestad Juan de Vera, quien dio traslado para que se cumpliera, guardara y ejecutara esta orden en la villa de Guadalcanal y otras limítrofes:
I.- Que este ordenamiento entrará en vigor el día mismo de su promulgación, concediéndose un plazo de dos años para su ejecución.
II.- Todos los pecheros deberán plantar en sus heredades una aranzada de olivos, como mínimo, equivalente a sesenta pies; Siendo de ellos la mitad para los agricultores de menor posesión.
III.- En la dicha plantación se cuidará la calidad de los frutos, que habrán de ser de buen veduño (pie o variedad de olivo).
IV.- De los vecinos o moradores que no tengan tierras ni heredamientos, los concejos correspondientes les cederán los terrenos necesarios de sus baldíos o comunes, con apercibimiento de multa para el que tal mandamiento no cumpla, de dos mil maravedises, a repartir entre la Real Cámara, el comendador y el denunciante; En este caso las autoridades locales obligarán al penado a cumplir lo estatuido en el término de un año.
V.- De las realizadas plantaciones, se preservarán éstas de la invasión de los ganados, a cuyos amos se impondrán penas que por cabeza oscilarán entre los veinte maravedises, de día, y el doble si el allanamiento ocurriera de noche; Y si fuera ganado menor, cuatro maravedises o el doble, según las circunstancias que se expresan.
Este ordenamiento fue entregado por el Gobernador de Llerena a D. Alonso González de la Pava regidor del Concejo de Guadalcanal, con fecha 12 de febrero de 1528.

Emilio Nogales Barragán.- Sevilla 2010

sábado, 25 de septiembre de 2010

GUADALCANAL EN LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA 3

MILICIANOS DE GUADALCANAL EN LA GUERRA DE LA INDEPENCÍA




Unos días después del 2 de mayo de 1808, llegaba a Guadalcanal la noticia del levantamiento. Se dispuso en este año que cada pueblo había de proporcionar cuatro mozos solteros por cada cien almas.
Entre las disposiciones dadas, se dice que todos los alistados gozarán de privilegio de nobleza personal, que los cuerpos de paisanos usen bandera negra con la cruz roja, como una cruzada, y en efecto, era una guerra religiosa, una Cruzada, en la que los religiosos predicaban a los vecinos animándoles a la defensa.
El 23-3-1809 se dice que el que tenga caballo, mula o yegua servirá en ellos y llevarán lanza y escopeta o tercerola, pudiendo añadir pistola o espada; los de a pie, escopeta y cuchillo, pueden añadir lo anterior, y si no hay escopeta, una onda. El año 1944 tuve en mis manos una de esas espadas, ya oxidada, que no se donde iría a pasar. También, que los que queden en el pueblo tengan arma de fuego o blanca, con especialidad, chuzos. Los ayuntamientos cuidarán de las familias, los cuales darán pan para tres días al que salga a campaña que ganará cuatro reales diarios y el pan, descontado. Los caudales se darán de los propios y arbitrios y las municiones, de cuenta del Ejército.
En el pueblo quedaron los casados con hijos, el alcalde, los clérigos presbíteros, religiosos e imposibilitados y algún otro. Fueron a la milicia los regidores, diputados, síndicos, mayordomos y alcaldes de la Hermandad entre otros cargos y parece que no hubo exonerados por donativos pues en la lista figuran grandes capitalistas.
También se disponía que se pagarían cien reales de recompensa a quien presentare un desertor; se formarán partidas de guerrilleros en los pueblos con el objeto de hacer guerra de guerrillas, hacer emboscadas, guardar los puntos difíciles y esperar al enemigo, dar ataques de noche, mantenerse en las sierras y parajes escabrosos, y hacer al enemigo todo mal posible.
Podrían pasar, según los méritos, a la milicia profesional y los clérigos tendrían beneficios curatos.
El ejército de Extremadura estaría compuesto de siete divisiones de paisanos, la quinta división llamada de Sierra Morena estaría en Guadalcanal, donde se pondría el cuartel general, compuesta de los paisanos de los pueblos del partido de Llerena. Se decía que todos estarían armados con escopetas del país. Estas divisiones eran, como ya se dijo, para hacer guerrillas y para apoyar a las militares.
Hubo algunos muertos de Guadalcanal, entre ellos José y Juan Spínola, y fueron sepultados en sus iglesias, y por parte francesa hubo muchas bajas en la que también tuvieron parte los que se quedaron en el pueblo que los mataban y los tiraban a los pozos.

Los héroes de aquella guerra son los que sigue:

Cayetano Taramón, José Calleja Cristobo, Luis Gil Cerezo, José Palacios, Francisco Palacios, Vicente Vázquez Joaquín de Gálvez, Manuel Reyes (casado), Antonio laso (casado), Tomás Barragán(casado), Miguel Palmerin, Francisco Moyano (casado), Francisco García, Benigno Rincón (casado) Francisco Pinelo, Nicolás Vázquez, José Vázquez, Ramón Blanco (casado), Cristóbal Márquez (casado), José Laso, Diego Álvarez, José Rodríguez ( casado), José Espino, Roque Yanes Caballero, Antonio Gallego, Francisco Lira (casado) Antonio Criado, Manuel Maqui, Juan Moyano, José Moyano (casado), José Benítez (casado), José Arenas, José Ferro, Ignacio Atalaya, Juan Moyo, Antonio Moyo, Francisco Gil, Juan Almanza (casado) José Careto (casado), Diego Heredia (casado), Juan Márquez Guerrero (casado), Alonso Gómez- (casado), José Barragán José de Chávez, Narciso Álvarez, José Carvajo (casado), Pedro Muñoz, Cayetano Yánez, Andrés García, Juan Arcos, José Rodríguez (casado), Justo Rodríguez, Miguel García, Cristóbal Cabezas (casado) Francisco Yanes de la Rocha (casado), Juan Yanes de la Rocha, Francisco Muñoz, Lorenzo Torrejón (casado) Sebastián Ruiz (casado), Fernando Martínez Porro (casado) Juan Bonilla, Nicolás de Gálvez, Cristóbal Spínola, Antonio Spínola, Manuel Márquez, José Márquez, Bernardo Ubifias, Antonio Gordón de Valencia (casado), Francisco de la Rosa, Marcelino Rodríguez, Francisco Riaño Rico, Cristóbal de Gálvez, Antonio Espino, Tomás de Cote, Juan Autón, Sebastián Autón, Bartolomé Ruiz, Antonio Muñoz Terrón, Juan de Cote, Cristóbal García, Miguel Muñoz Pecero, José Muñoz Maleno, Rafael Delgado, Juan Pinelo (casado) Cristóbal Rodríguez, José Guerrero Ibáñez, Antonio Pizarro, José de Lania (casado), Miguel de Bejar, Antonio Parrón (casado), José Rodríguez, Juan Rincón (casado), José Ugía Veloso, José Ruiz Cabezas (casado), Andrés Moruno, Juan Ortega Parra (casado), Pedro Gil, Manuel Hernández, Miguel Caballero (casado), José Domínguez (casado), José Gallego, Martín Cabezas, Martín Rodríguez, Juan Carrillo, Cristóbal Guerrero (casado),Miguel Fontán, José Grueso, Juan Ruiz Chávez, Juan de Gálvez, Antonio Sillero, Isidro Franco, Francisco Márquez, Antonio García Zarco, Diego Carabón (casado), Juan Sayago( casado). Tomás Alcántara, Juan Sánchez (casado), José Galván, Antonio Hernández, Ramón Chamorro (casado), Diego Valverde (casado), José Hernández, Juan Cabezas (casado), Benigno Bernabé Rivero (casado), Francisco Lavera (casado), Nicolás Ruiz, Juan Díaz (casado), Francisco Naranjo (casado), Manuel Hernández Romero, Juan de Castilla Venero (casado) Juan Blanco (casado), Miguel Ruiz Piedra, Juan Muñoz Mata, Nolasco Chamorro (casado), Alfonso Merchán, Manuel de Vega (casado), José Quiñones, Francisco Barragán, Ramón Gallego, Benigno Rivero, Juan Spínola, Alfonso Durán (casado), Ventura de Tena (casado), Cayetano de Tena, Juan Guardado, Bruno Sánchez, Félix Serrano, Juan Conejo, Ramón Castilla, Juan de Castilla, Diego Forzuo ( casado), Anselmo Osuna, José Seco (casado), Pedro Cerezo, José Díaz, Antonio Carpintero Núñez (casado), Manuel Sánchez Riaño, Francisco Rincón Dragón (casado), Juan Parrón (casado), Antonio Cantero, Martín Vázquez Ortega, Juan Trancoso, José Mexía, Juan Duran, Ambrosio Cortés, Luis de Castilla, José Moreno el jabonero (casado), Martín Ximénez (casado), Francisco Yanes (casa abierta).
Este trabajo viene a cuento por la actualidad del tema del ejército en que se da fin a las quintas forzosas en este año. Es un recuerdo de aquellos valientes que lucharon para defender a Guadalcanal y a España. (sic)

ANTONIO GORDÓN BERNABÉ.- Revista de Feria 2001

En este último artículo se han suprimido los párrafos que ya estaban incluidos en los dos capítulos anteriores.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

SABINO EL VIAJERO


ISLAS SALOMÓN

GENERALIDADES: Independientes desde 1978 e inmersas en la Commonwealth, las islas Salomón, algo así como unas 900 (contando los islotes), componen un ancho archipiélago con una población total de 300.000 habitantes. Sólo seis están pobladas. Su capital, Honiara, en la isla principal de Guadalcanal, tiene 35.000 habitantes. Son muy pobres y tienen una economía de subsistencia. Casi el 90% trabaja en la agricultura y pesca. Probablemente sea uno de los países más pobre del Pacífico Sur, junto con Vanuatu, antigua colonia de la Corona británica.
Además de las típicas lenguas melanesias hablan el pitgin que, en este caso, se deriva del inglés. No obstante tienen palabras españolas; para decir “no sé”, dicen: "mi no sabe" y para decir pequeño dicen: "piquilín". Lo que más gracia me hizo, al hablar con ellos, fue descubrir que el nombre de Sabino es muy utilizado en las islas de Makera, eso ¡me emocionó!
Son católicos y protestantes, pero quedan unas tradiciones muy fuertes de tipo animista: tabúes y totemismo ocultos. Dentro de esas tradiciones están: la de creer en los espíritus de los muertos, en la iniciación de los jóvenes para convertirse en responsables padres y miembros del clan, la de mantener algunas zonas "tabúes" y hasta algunos temas también "tabúes", etc. En el caso de la "iniciación", que se da más entre familias de pescadores suelen, además de las enseñanzas clásicas, relatarles los lugares secretos donde ir a pescar.
La iniciación puede durar dos años, tiempo durante el cual están alejados de sus familiares en áreas de la misma isla o en otras islas próximas.
La moneda es el dólar de Salomón que viene costando unas cuarenta pesetas y que no vale nada fuera del país. Sus únicos recursos económicos están en la agricultura: la copra, las patatas, el aceite de palma, el cacao, etc. El mar que les rodea les ofrece mucho pescado: atunes pequeños y grandes, langosta, pargos, bonito, etc., que compran o bien pescan ellos mismos en la orilla con un anzuelito. Mucha gente no trabaja pues no hay trabajo. Como la naturaleza les garantiza la comida y el clima no les exige una casa cara, sino que se arreglan con una cabaña de cañas o palmas, así pueden ir trampeando por la vida.
Son encantadores y muy hospitalarios. Siempre me han saludado al pasar por un camino o por una carretera. Cuando entraba en su aldea o pequeños clanes, todos venían a darme la mano. Nunca me han pedido nada. Siempre me han ofrecido fruta y se han ofrecido ellos mismos a que les hiciera alguna fotografía.
Por ello me he sentido muy bien por aquí. Nadie piensa en robarte ni en molestarte. Así fue como pude, yo solo, recorrer detenidamente algunas islas. Salvo en Guadalcanal, en la que hay en total 80 Km. de carreteras, en las demás islas del archipiélago no hay ni carreteras ni caminos. Esto quiere decir que cuando llegas a una isla sólo puedes visitar el puerto y su pueblecito, pues el resto de la isla es inaccesible. Son típicamente volcánicas: una enorme montaña de unos 1000 metros en el centro, con unos taludes tan verticales hacia el mar que no hay forma de hacer una carretera que la rodee. La propia capital Honiara no tiene asfaltada ni su calle principal.
La nominación de las islas y de algunos pueblos fue realizada por el navegante español Alvaro de Mendaña en 1568, el cual vino de Perú animado por una leyenda que decía que aquí había mucho oro. Aunque no encontró nada de valor, a su regreso contó a sus patrocinadores reales increíbles historias sobre las “riquezas de las islas” diciendo que se asemejaban a las legendarias minas del Rey Salomón. Parece ser que de ahí viene su nombre. Y mi nombre, quizás, provenga de algunos de los marineros vascos que anduvieron por aquí. Las islas tienen nombres como: San Cristóbal, Santa Cruz, Santa Isabel, Espíritu Santo, etc., y los pueblecitos: San Jorge, Santa Ana, etc.
Los melanesios, son en general, de piel oscura y raza negroide, cabellos crespos, fuertes, etc. Es decir son los negros de Oceanía. Son de cuerpo fuerte, miembros robustos y en algunas islas, como ocurre en las Salomón, hay más de un 50% de ellos con pelo rubio. Curioso, ¿verdad? Les encantan las cosas artísticas, para las que tienen una cierta habilidad, como las esculturas de madera, oficio que aprenden de sus padres.
El calor es la tarjeta de visita. La temperatura, durante mi estancia, ha estado siempre por encima de 33° C pero con una humedad que te podías morir. Siempre hay nubes. La diferencia entre el invierno y el verano no es más que el hecho de que esas nubes traigan más agua o menos agua, pero llover siempre llueve y nubes siempre hay. Con el calor y la humedad, caldo de cultivo para los insectos, es fácil encontrar de todo en la habitación de un cutre hotel como el que yo tenía, y era el mejor. Al parecer ya era cutre en 1942 cuando llegaron aquí los japoneses. Así que cucarachas, hormigas, lagartijas.... etc., de todo eso tenía yo. Hasta llegué a hacerle una foto a una ranita que me entró por la terraza. Debe de ser una de las ranas más pequeñas del mundo. Por cierto que hay millones y millones de un determinado pájaro (podría se un Pinzón grande o el Indian Minor Bird) que ocupa el puesto de los gorriones los que, por cierto, no vi ni uno.
Se conduce por la izquierda y las monedas tienen en una cara la reina de Inglaterra.
Se come pescado y marisco por todas partes: langostas, gambas, langostinos, etc. Por el precio de los espaguetis: 500 Pts., puedes tomar una langosta entera y muy fresca. Lamentablemente la langosta no me dice nada, pero de las gambas he de decir que no se parecen en nada a la buena gamba española. Comen también: taro, tapioca, ñame y boniatos; algo de cerdo salvaje, parecido al jabalí, perros y algunos reptiles: supongo que debido a la influencia de la población china y vietnamita
Mis desayunos siempre empiezan con un coco, después un gran plato de riquísima papaya con un poco de limón, sandía dulce, piña tropical, zumo natural de tomates frescos de árbol, pomelos dulces, etc.
También, otra cosa simpática es la de su "flota" aérea compuesta por dos aviones: uno de cincuenta plazas y otro de quince. La fotografía de la flota esta por todas partes. Con el pequeño, que se puede caer en cualquier momento, visité las islas vecinas y con el "grande" volé a Vanuatu. Tres horas de trayectos.
Las familias viven muy unidas en las mini aldeas. Visité muchas pues están construidas al lado de la carretera, sobre la orilla del mar, y cuando paraba para hacer una fotografía salían todos a saludarme. Por las carreteritas casi no hay vehículos y se ven muchos árboles de frangipanis, mangos, palmeras cocoteras, palmeras de aceite, árboles de cacao, tapioca, taro, etc. También hay millones de palmeras con el tronco rojo, debido a un liquen que se desarrolla sobre la corteza. Ya no digamos otros árboles de gran desarrollo tipo: Mahogany, Rosewood, Ébano, etc. Cuando recorría la parte oeste de Guadalcanal me acordaba constantemente de Samoa. Tanto los niños como los adultos te saludan al pasar incluso detienen su trabajo para hacerlo. Son encantadores.
He visitado las islas más próximas a Guadalcanal: Malaita, Santa Isabel (nombre de la mujer de Malasaña) y Florida. Tuve un tiempo lluvioso y feo. La belleza de estas islas radica, principalmente, en los colores de los arrecifes y lagunas o bien en la vida submarina de la fauna coralina. Más que islas, yo diría que son montañas rodeadas de mar. En las lagunas hay manglares con árboles de grandes dimensiones.
Lo que ha dado fama a la isla de Guadalcanal ha sido la famosa, dura y sangrienta, batallaentre los japoneses y los americanos, allá por finales de 1942, en plena Segunda Guerra Mundial. Por toda la isla te vas encontrando cañones, bunqueres, aviones, tanquetas, etc. que forman los restos del enfrentamiento entre los japoneses y los americanos: un auténtico museo de la 2ª Guerra Mundial. Una película con el título "Guadalcanal", mostrando las heroicidades del ejército americano y, al mismo tiempo, la crueldad de los japoneses, dio la vuelta al mundo varias veces. Fue una de esas de "guerra", tema inagotable. Curiosamente, debido a la guerra, los americanos construyeron las actuales carreteras (que son poquísimas) con fines estratégicos, lo que creó una infraestructura que serviría para desarrollar la isla.
Sus casas-cabaña están construidas a base de un débil "esqueleto" de trozos de madera y tanto techo como paredes están hechos de ramas de palmera. La existencia de una malaria mortal causa estragos en la población. La esperanza de vida está en los cincuenta y tres años. Por ello la jubilación es a los cincuenta. No se conoce prácticamente el turismo. Los extranjeros que vienen lo hacen por motivos de negocios o trabajo. Por otra parte la infraestructura hotelera es prácticamente cero. La malaria desanima siempre al turista.
Honiara, la capital de Guadalcanal tiene un pequeño Chinatown en donde viven los ricos, que son los chinos que inmigraron y que supieron ganar dinero. El mal tiempo me ha impedido hacer un mejor reportaje marino.
De nuevo…a coger una de las avionetillas cuyo mantenimiento, en manos de estos isleños, te ponen los pelos de punta. Hay que pensar que siempre son dos horas sin ver tierra por lo que cualquier pequeño accidente... ¡en picado al mar!

SABINO VISITA GUADALCANAL
JUNIO 1998

domingo, 19 de septiembre de 2010

CANTO A LA LIBERTAD


El Abuelo

(*) Memorias de un beduino en el Congreso de los Diputados



José Antonio Labordeta Subías, *Zaragoza, 10 de marzo de 1935 +Zaragoza, 19 de septiembre de 2010.



Me acabo de levantar y al encender mi teléfono un sms que me deja parado y pienso que hoy no va a ser un buen día, me lo ha enviado un amigo, con un corto mensaje me dice: “esta madrugada ha muerto El Abuelo, el amigo de todos”.
Mas allá de sus ideas políticas, ha muerto un hombre amable y bonachón, un cantautor, profesor, escritor, presentador y político, “con voz pero sin voz”, como el mismo se denominaba, amigo de sus amigos y lo mas importante “mi amigo”.
A José Antonio le conocí personalmente hace más de diez año en unas charlas sobre Aragón y su desajuste autonómico, aquí en Teruel, me lo presentó un amigo que fue alumno suyo en clase de geografía allá por el año 1965, en el Instituto Nacional de Bachillerato "Ibáñez Martín" de esta ciudad, en aquel momento me cautivó y me hizo su amigo, o al menos así lo pienso, ya que cuando hemos podido, no demasiadas veces pienso, hemos hablado y me tenía en su lista telefónica de “herederos del país de la charanga”, como el cariñosamente llamaba a España.
Recuerdo que varías veces le tuve que narrar la pequeña historia de la primera vez que le conocí:
Fue en Madrid, en Diciembre de 1975, cuando recién muerto el dictador dio un concierto en la Plaza Mayor, todo empezó bien, hasta que cantó Su canción "El canto a la libertad", todos los allí presente encendimos los mecheros y tarareamos la letra, en ese momento llegaron los grises y se acabó el concierto y el frío que nos atenazaba, tuvimos que correr y recibimos algún impacto de las porras, que por aquella época los policías eran grises de porra fácil, que dice un amigo mío; Lo recordábamos y él se reía y me comentaba que al menos a nosotros se nos quitó el frío, pero él aquella noche durmió en los sótanos de la antigua DGS de la Puerta del Sol, por alteración del orden público y se le congeló el bigote.
Quiero que sirva este pequeño recordatorio como un epitafio para un amigo que se llevó este “País en la Mochila”, una mochila llena de amigos y cosar por terminar.

Su historia.-Hijo de Miguel Labordeta y Sara Subías, era hermano del poeta Miguel Labordeta. Cursó sus estudios primarios en el Colegio Alemán de Zaragoza y en la escuela familiar, donde concluyó el Bachillerato; se matriculó en Derecho y, finalmente, se licenció en Filosofía y Letras por la Universidad de Zaragoza, que le ha nombrado Doctor Honoris Causa. En 1964 aprobó las oposiciones de Enseñanzas Medias, como profesor de Geografía, Historia y Arte y fue destinado al Instituto Nacional de Bachillerato "Ibáñez Martín" de Teruel. Tanto en éste como en el Colegio Menor "San Pablo" impartió clase a Joaquín Carbonell y a Federico Jiménez Losantos. Estaba casado con Juana de Grandes (sobrina del general Muñoz Grandes) y tenía tres hijas (Ana, Ángela y Paula) y dos nietas.
El cantautor.-Fue considerado uno de los principales exponentes de la canción de autor española. Inició su carrera musical en (1963) con el álbum Cantar y callar (1974). Otros destacados son: Tiempo de espera (1975), Las cuatro estaciones (1981), y 30 canciones en la mochila. En sus canciones habla de su tierra, siempre con un tono de melancolía que, como él reconoce, le caracteriza. Sus canciones más famosas son Canto A La Libertad, considerado extraoficialmente como el verdadero Himno de Aragón, si bien el gobierno autonómico se niega en aceptarlo como tal; Aragón y Banderas Rotas.

El escritor.-Su faceta como escritor siempre se vio en un segundo plano debido a que era más conocido como cantautor y diputado. Publicó un total de 24 libros. Fue autor de varios libros de poemas, como Sucede el pensamiento (1959), Diario de náufrago o la Antología Dulce sabor de días agrestes (2004); de novelas, como Cada cual que aprenda su juego (1974) o Mitologías de mamá; de libros de memorias, como Con la voz a cuestas (1982), Banderas Rotas (2001) o el recién publicado Memorias de un beduino en el Congreso de los Diputados (2009) en el que cuenta sus vivencias como diputado en Madrid. Además, entre sus últimos títulos cabe citar Aragón en la mochila (1983), Los amigos contados (1994), Un país en la mochila (1995) o Tierra sin mar (1995). Participó en la fundación y el desarrollo del semanario Andalán, periódico ya mítico que se opuso al antiguo régimen en los últimos años de la dictadura y marcó la transición en Aragón. Tenía su propio blog donde colgaba los últimos poemas que escribió y, hasta hace poco, colaboraba como columnista en el periódico Público.
La televisión.-Quizá su faceta de presentador sea una de las más populares gracias al exitoso programa de Televisión Española Un país en la mochila, una serie de 29 capítulos donde Labordeta, mochila a la espalda, recorría la España de interior mostrando la cara más desconocida del país y de las gentes que en él viven.
El político.-Se presentó al Senado por Izquierda Unida. Ya como miembro de Chunta Aragonesista (CHA), fue elegido diputado por Zaragoza en 2000 y 2004, siendo el representante de este partido aragonesista en el Congreso de los Diputados desde el año 2000 hasta el 2008. Aún siendo (como él mismo dice) el diputado con menos votos de toda España no dejó de ser foco de atención y protagonismo. Acérrimo defensor del No a la guerra y contrario al Trasvase del Ebro siempre marcó una nota diferente en el Hemiciclo. En un par de ocasiones llegó a un enfrentamiento verbal con diputados del Partido Popular. En uno de ellos acuñó su famosa frase “A la mierda”. Él mismo bromeó que ésta sería la frase que aparecería en su lápida.
En las elecciones de 2008, en que Labordeta deja de ser cabeza de lista, CHA pierde su escaño en el Congreso.
El reconocimiento.-Orden de Saurí.-El gobierno de Nicaragua concedió a José Antonio Labordeta la Orden de Saurí en 2003, su máxima distinción nacional.
Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo.-El Consejo de Ministros del viernes 4 de diciembre de 2009 acordó conceder la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo a José Antonio Labordeta; reconociendo su labor y trayectoria como profesor, cantautor, escritor, presentador y diputado por Chunta Aragonesista (CHA) en el Congreso durante dos legislaturas.
Doctor Honoris Causa por la Universidad de Zaragoza.-El 23 de marzo de 2010 la Universidad de Zaragoza llevó a cabo la investidura de José Antonio Labordeta como Doctor Honoris Causa.
Gran Cruz de la Orden de Alfonso X el Sabio.-El 6 de septiembre de 2010 le fue entregada la Gran Cruz de la Orden de Alfonso X el Sabio otorgada por el Gobierno de España.

(*) Memorias de un beduino en el Congreso de los Diputados, fue su último libro publicado en el 2009 y en el que cuenta sus vivencias como diputado en Madrid

Rafael Spínola Rodríguez.- La Fragua del Pensamiento

sábado, 18 de septiembre de 2010

GUADALCANAL EN LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA 2

APORTACIONES DE CABALLOS

De la Junta Suprema de Extremadura se recibió el siguiente escrito:
Las Justicias de los pueblos de Las Casas, Reyna, Fuente del Arco y Guadalcanal dispondrán inmediatamente que se entreguen a disposición del Sr. D. Francisco Santacruz, Capitán de los Reales Ejércitos, dador de esta, todos los caballos, sillas, bridas que se hallen en poder de los vecinos sin distinción de persona alguna, ni destinos en que se ocupen, como no sea en el de padres por montar las yeguas, y esto en el caso de estar aprobado con un mes de anterioridad, haciendo que en el mismo acto de la entrega, se justiprecie por dos peritos que elegirán dicho escribano y la Justicia, entendida esta que en caso de omisión o falta de obediencia, se le exigirá un mil ducados de multa y se tendrán por traidores a la Patria, por lo urgentísimo que es, y útil a toda la nación, el evacuar este importantísimo servicio. Dios guarde a VM muchos años. Llerena y Diciembre 5 de 1808. Joaquín Casquete de Prado, Antonio Muñoz, Fernando Medina.
Otro escrito dice lo que sigue: En la noche de este día, acaba de presentarse D. Francisco Santacruz, Capitán de los Reales Ejércitos, con el oficio anterior, y visto por el Sr. Corregidor dijo: Se guarde y cumpla y execute en todas sus partes y para que llegue a noticia del vecindario, se publique inmediatamente bando previniendo a todos los que tengan caballos desde edad de tres años en adelante, a excepción de los padres para la monta de yeguas, los presenten en el día de mañana y hora de las siete en la plaza pública, como también todas las sillas de montar y bridas, cabezadas y demás fornituras de montura y todo bajo la multa de mil ducados a disposición de los Señores de la Junta, que se le exigirán al inobediente, y verificado el recogimiento de uno y otro, se remitan con sus dueños, los que quisieren ir, a la ciudad de Llerena, por cuya junta se mandarán tasar según se previene.
Por esta así lo mando y firmo en Guadalcanal a de Diciembre de mil ochocientos y ocho.

Firma el Corregidor

Y luego incontinente por voz del peón público en las esquinas y sitios públicos de esta villa, se hizo notorio el contenido del antecedente acuerdo para su exacto cumplimiento y asimismo se despachó por el Sr. Corregidor de ella al tenente de la aldea de Malcocinado de esta jurisdicción para que a las siete de la mañana del día siguiente se hallen todos los caballos que tengan sus moradores desde la edad de tres años arriba, en la plaza pública de esta villa y para que todo así conste, lo estampo por fe y diligencia que firmo, Juan Antonio Guerrero, escribano.
Diligencia de presentación de caballos y monturas. En la villa de Guadalcanal a 6 días del mes de Diciembre de mil ochocientos y ocho años, Martín Castelló Rexidor Decano en la mañana de este día se constituyó en la plaza pública con asistencia de D. Francisco Santa Cruz comisionado al efecto decretado, y estando en ella, se fueron presentando por los vecinos, los montura que con distinción de nombres y caballos, sillas, bridas y demás efectos de apellidos de sus dueños son los siguientes:

Con tres caballos: Agustín Váquez
Con dos caballos: Francisco Carrasco, Juan Gallego, Sebastián Gordón, Antonio Veloso, Sebastián Álvarez, Manuel Palacios, Joaquín Rodríguez, Joaquín Palacios.
Con un caballo: Sr. Corregidor, Jesús Ferro, Estanislao Núñez, Pedro Muñoz (Clérigo), Joaquín de Gálvez, Juan de Gálvez Rubio (Clérigo), Diego de Morales, Joaquín de Ortega, Antonio Castilla, Federico Abel, Ventura de Tena, José Carvajo, Viuda de Pedro Caballero, Juan Ruíz, Martín Calero, José García (Clérigo), Cura de San Sebastián, Vicente Zapata, Juan de Ortega, Juan González, Diego Díaz, Alonso Pérez, Juan Ximénez Parra, Paulino Caro Guerrero (Vicario), Adrián Murillo, Juan Moreno, (Clérigo), Ana Autón, Nicolás de Rozas, Joaquín de Monsalve, (Clérigo), Juan Barrera, Clérigo, Antonia Rica, Sebastián de Cote, Pedro Felipe Sánchez (Médico), José Cabezas, Antonio Delgado Perelló, Alonso López (Clérigo), Antonio Cabezas, Juan de Castilla, Juan Gordón, Cayetano de Ayala (Clérigo),Pedro León Alaja, José Ponce, Francisco Palacios, Eusebio Rodríguez, Cristóbal Cabezas, Baltazar Romero, Cristóbal Riaño (mayor), Cristóbal Riaño (menor), Juan Márquez, Diego Cordero, Cristóbal Cordero, Antonio Grueso, Manuel Grueso, Andrés Grueso, Antonio Grueso (menor), José Chavero, Manuel Grueso Fraile, Antonio Vázquez Ortega, Juan Hernández, Manuel Hernández, Antonio Márquez Guerrero, Francisco López Rico, Xavier de Cote, José Ayala, Pedro del Cerro y Antonio de Gálvez.

Y no habiendo presentado más caballos y efectos, se hubo por conclusa, sin perjuicio de continuarla con la mayor actividad en el de mañana, habiéndose mandado pase todo lo presentado a la ciudad de Llerena.
En 7 de Diciembre de 1808 se continuó la diligencia, aportando un caballo cada uno: Juana Rica, Fernando Pinelo, Cayetano Ayala, José Quintero, Ignacio Pérez y José David. La mayoría presentaron caballos y se quedaron con las monturas, excepto tres que presentaron monturas sin caballos.
En 20 de Marzo de 1809 se hizo otra requisa de caballos a los vecinos que siguen:
Con dos caballos: Antonio Mª López, Antonio Veloso y Manuel Palacios.
Con un caballo: Juan Ruiz, José García (Clérigo), Nicolás de Rozas, Pedro Alaja, Martín Calero, Antonio Vázquez, El Sr. Corregidor, Francisco Palacios, Francisco Núñez, Cristóbal Riaño, Cristóbal Riaño (menor), Cayetano Ayala, Ignacio Pérez, Andrés Albarrán, Juan Ximénez Parra, El Sr. Vicario, Antonio Ramos, Viuda de Cordero, Francisco Morente, Diego Mostales,, Joaquín Rodríguez, Mateo García, Antonio Cabezas, Juan Moreno, Francisco López Rico, Juan Barrera, Eusebio Rodríguez, Juan Cantero, Diego Díaz, Xavier de Cote, Fernando Pinelo, Pedro Torrico (Médico), Alonso Pérez, Sebastián Gordón, Baltazar Romero, Manuel Grueso, Andrés Grueso, Antonio Márquez, Juan Vázquez, Juan Gordón, José Ponce, Juan González, viuda de Pedro Caballero, José Cabezas, Juan Márquez, Joaquín Palacios,. Sebastián de Cote, Antonia Rico, Estanislao Núñez, Francisco Carrasco, Francisco Cortés, Diego Cordero, Manuel Romero, Sebastián Chavero, Juan de Ortega, Ana Autón y José de Ayala.

Estos serían los que tenían dos años en 1808, quedando muy reducida la caballería en Guadalcanal, sólo con los potros, que podían ser potrancos y tusones según fueran menores de tres o de dos años respectivamente, además de los caballos padres.
He observado que, en esto de los caballos, había familias que los tenían desde antiguo, otras los poseían unas generaciones sí y otras no y aún una persona podía tener caballo en cualquier época de su vida. Es curioso que los médicos y muchos clérigos los tenían. Un caballo valía por entonces novecientos reales más o menos.
En total fueron 155 caballos los que se llevaron a Llerena para el Ejército de Extremadura que era el V Ejército. No sé cuándo les pagaron a sus dueños, pero sí me imagino el gran disgusto que se llevarían, como si me hubiese ocurrido a mí, que me gustan y los monto con frecuencia. Concretamente, mis familiares tuvieron que entregar cinco caballos que habían recibido de una herencia de su padre poco antes, y este fue el primero de una serie de infortunios que cayeron sobre los vecinos de Guadalcanal en la Guerra de la independencia contra los franceses.
ANTONIO GORDÓN BERNABÉ

Revista de Feria 1994

miércoles, 15 de septiembre de 2010

LOS MAQUIS EN SIERRA MORENA

MAQUIS



Reproduzco aquí el artículo que, escrito por encargo, me ha sido publicado en la revista que se edita en mi pueblo, para su pública difusión:

Revisando las viejas cintas de casete, guardadas en una caja de zapatos en espera de que una limpieza exhaustiva las jubile definitivamente, encontré una cinta en la cual había grabado a mi padre contando las típicas batallitas que todo buen padre ha de contar a sus hijos. Sin ánimo de recordar las batallas, sino por el único placer de volver a escuchar su voz; volví a reproducir la cinta.

He de decir que recordaba vagamente lo que allí se contaba; pero la historia, como tantas, era realmente fascinante: una historia de bandoleros en pleno siglo XX. El relato forma parte de una época de la cual se habla poco, siempre bajito; las madres y abuelas recuerdan pero no hablan y los padres y abuelos prefieren olvidar. Evidentemente estoy hablando de la guerra y la posguerra.

Mi padre cuenta en primera persona el encuentro de un niño de apenas diez años con el forajido que amedrentaba a ricos y poderosos de la época y el lugar. Indagué en Internet, en libros y pregunté a aquellos familiares más ancianos hasta hacerme una composición de lo que supusieron los guerrilleros antifranquistas en la historia de este país. Intentaré en estas líneas esbozar una semblanza:
Realmente se conoce poco aún de la historia de los maquis. Mitificados por una parte y degradados a la categoría de bandoleros (cuando no terroristas) por la otra, sus verdaderas motivaciones siempre fueron manipuladas. De hecho, lo de “maquis” fue un nombre que vino después. Entonces se les llamaba “los echados al monte”. Aquí tenemos una de las claves: fueron echados, es decir, no se iban por su propia voluntad como guerrilleros. Una buena parte de los maquis que recorrían nuestra sierra eran prófugos, presos que se habían escapado de la cárcel de Azuaga adonde habían llegado por distintos motivos: junto a presos políticos, soldados republicanos y guardias de asalto en espera de destino de destierro, se mezclaban verdaderos rufianes y bandidos que aguardaban la pena capital. Por otra parte había un grupo de represaliados del pueblo a los que les negaban el trabajo y también el permiso para marcharse a otro lugar a buscarlo.
Para unos y para otros, la única escapatoria era la de vivir de lo que robaban, para ellos y para sus familias, en espera de que las cosas cambiasen. Y hoy sabemos que tardarían en cambiar muchos años.
La partida que conoció mi padre se formó en la primavera del 41 y siempre tuvo sus bases principales en el extremo occidental de Sierra Morena y sus refugios o puntos de apoyo en la Sierra del Recuero. Algunos apodos como “el Tripas”, “el Chato”, “Azulito”, “Baldomero”, “Pinche”, “Cantares”, “Calderón”, “Alemán”, “Cristo” o “Turronero” se dejaron ver por la zona del pueblo, moviéndose y ocultándose en lo que abarcan los términos de Alanis, Cazalla de la Sierra, Guadalcanal y Constantina. Se relatan “encuentros” en Nava Baja, del término de Alanís; en las proximidades de Piconcillo de Fuente Ovejuna (Córdoba), y multitud de atracos en cortijos del término del Pedroso, como Candelero, Riscos Blancos, La Lobera, La Navarra… En uno de los cortijos, no diré el nombre, fue donde mi padre los vio y pudo hablar con ellos, siendo niño.
Esta partida, encabezada por “El Chato de Malcocinado” actuó por la zona de Llerena (Fuentes del Arco, Pallares, Bienvenida, Usagre, Llerena, Valencia de Las Torres), con puntos de apoyo en Sierra Prieta. Tuvo una zona de actuación muy dilatada, que se extendió hasta Cumbres Mayores (Huelva), El Pedroso (Sevilla), Hornachuelos y Fuenteovejuna (Córdoba) y Azuaga (Badajoz).
No podemos decir que fueran santos. Si había que matar, se mataba. Venganzas por lo pasado las hubo. Y si para poder escapar había que llevarse por delante al que se interpusiera en el camino, se hacía. La partida que merodeó por aquí, se dice que asesinaron a un alguacil en Azuaga, a varios vecinos e incluso a propietarios de cortijos de la zona de Bienvenida. Culpables eran de los secuestros o ejecuciones de gente destacada del bando franquista (también a informadores o delatores) que se les imputaban. Otra cosa es lo que la propaganda franquista hacía llegar a la opinión pública, como asaltos y violaciones indiscriminadas.
Si bien con el apoyo del ejército, fue la Guardia Civil la encargada de perseguir y luchar contra estos guerrilleros. Los encuentros entre ambos (Guardia Civil y maquis) eran minimizados por la prensa franquista denominándolos “refriegas”, si bien eran verdaderos enfrentamientos a tiros y cuerpo a cuerpo entre una partida y miembros de la benemérita. Si consideramos que la partida que merodeaba por aquí tenía más de quince componentes, podemos imaginarnos que esos encuentros no eran precisamente un juego de niños. Así ocurrió en el arroyo de la Encarnación, cerca de nuestro pueblo el 3 de agosto de 1944, por ejemplo. En un encuentro (“intensa refriega”) en el término de El Pedroso 14 días después, seis miembros de la partida fueron muertos, incautándoles dos escopetas, un fusil, un rifle americano, dos pistolas, 20.000 pesetas y cuatro macutos, con municiones y otros efectos.
Se cuenta que la propia guardia civil creo “contrapartidas” para detectar grupos de apoyo a los maquis, e incluso que estos falsos guerrilleros hicieron cuanto les vino en gana, de hecho –me cuentan- que llegaron a secuestrar a personas bien aposentadas, incluso de derechas. Está escrito que en una finca de Alanís golpearon al cortijero y a sus hijos. El cortijero, preso del pánico, sacó a la familia de allí y entregó las llaves de la finca a la dueña, explicándole lo ocurrido. La señora fue a ver al sargento de la Guardia Civil, pero éste le contestó que “escapaba a su jurisdicción, pues las Contrapartidas dependían de la Superioridad». Sólo ante la amenaza de la dueña de la finca "de hacer intervenir a gente amiga de Madrid influyente", el sargento cedió, prometiéndole que nunca más irían por la finca a molestar a nadie.
La partida de nuestro pueblo anduvo siempre bastante suelta, e incluso se decía que rendían visitas nocturnas a sus mujeres sin que nadie se atreviera a cortarle el paso. En uno de los testimonios recibidos por mí se encuentra una explicación: los ciudadanos ayudaron tanto a los del monte debido a la tremenda represión que estaban sufriendo y a las injusticias de las que hacían gala “las fuerzas vivas” y, en cierto modo, era un modo de saldar cuentas con sus verdugos. Si algún potentado de un pueblo de alrededor profería una amenaza a alguien haciendo uso de su poder por ser afecto al régimen, al llegar esto a oídos de los del monte, era posible que el opresor fuera capturado y, tal vez, asesinado. Los ricos tomaron un enorme miedo, no acercándose a los cortijos. Cuenta mi padre que en diez años no vio una sola vez al “amo” del cortijo, situado en la encrucijada de Badajoz, Sevilla y Córdoba. Algunas veces la sola presencia en los montes de una partida armada, atemperaba el furor ultramontano de determinadas "fuerzas vivas”.
De vital importancia es, por tanto, el apoyo que le daba la población. En un principio, recién echados al monte, es la familia y las amistades más íntimas las les procuran la comida, dejándolos en lugares previamente pactados o visitando de manera nocturna su antiguo hogar. Los atracos vienen después, cuando a las familias se las vigila y se las persigue, actuando la autoridad muchas veces con saña contra ellas (se las encarcela, se las corta el pelo y se les da escarmiento público…). Incluso algún familiar tras esto se echó al monte escapando también, debido a la represión laboral y al boicot económico que se les hacía, impidiendo que se pudieran ganar el jornal. Al pasar el tiempo, las tornas cambian. Eran años de hambre y los de la sierra hacían partícipes de sus botines a los familiares más necesitados.
El medio más frecuente de obtener dinero era mediante el secuestro de personas adineradas y pedir el correspondiente rescate, a veces muy sustancioso. Por ejemplo, un secuestro en la Solana, el 29 de enero de 1943, les produce como botín veinte mil duros (600 € de la época). ¿Y qué hacían con ese dinero?: Dárselo a familiares y necesitados. Se cuenta un caso de un necesitado del pueblo al que le dieron dinero para medicinas. Delatado el hecho por un vecino de Azuaga, el enfermo fue encarcelado. Los alimentos los robaban o se los entregaban ciudadanos afines y las armas las obtenían de asaltos a la guardia civil generalmente. Otro secuestro sonado fue el de un hermano de un ingeniero de minas en Cazalla de la Sierra. El rescate le costó doce mil duros, esto es, sesenta mil pesetas. Quiero hacer notar que entonces, en 1944, el salario de un campesino era de 12 pesetas al día (el mismo que 8 años antes).
Pese a todo, el fin de estos guerrilleros, estaba escrito. No existía escapatoria ni alternativa para los echados al monte. La rendición suponía la pena de muerte al aplicarse la ley de fugas. El destino de cada uno de ellos era el de morir en los encuentros con la guardia civil, en ocasiones traicionados por los propios enlaces. En uno de los libros que he usado para documentarme, se dice que en aquellos más de diez años de bandolerismo, hubo 2.173 maquis muertos y 467 heridos o capturados en toda España.
En este tema, y con la lejanía que nos da el tiempo, es imposible separar dónde termina la violencia justificada de unos combatientes que se niegan a rendirse y dónde empieza el simple crimen terrorista. Fueron convertidos en héroes por un sector de la población ansiosos por tener esperanza. Sólo conociendo de primera mano la época convulsa se puede hacer una lectura real de lo ocurrido. Desde aquí animo a los lectores a que pregunten y, al fin, comprendan.
Sobre la historia general de los maquis en España hay algunos libros muy interesantes, donde se cuenta la historia completa por provincias, intervención de los partidos políticos afines a la república, etc. A todos les recomiendo su lectura.

Raúl M. Rojo.-Azuaga, Agosto 2008

sábado, 11 de septiembre de 2010

GUADALCANAL EN LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA 1


LEVANTAMIENTO DEL 2 DE MAYO 1808

Había llegado la noticia del levantamiento del 2 de mayo unos días después a Guadalcanal, y al igual que todos los pueblos, se aprestaron defenderse. En ese año de 1808 se estableció que cada pueblo había de proporcionar cuatro mozos solteros por cada cien almas, haciéndose en diciembre una requisa de caballos mayores de tres años que fueron entregados en la plaza pública, llevándose se alrededor de cien caballos a Llerena.
El 10-2-1809 se hizo un alistamiento en el que se incluían mozos solteros, clero de órdenes menores, casas y viudos sin hijos y solteros con casa abierta desde los 16 a los 45 años, haciendo un total de 207 hombres. En otros escritos se hace alusión a que todas las personas útiles para las armas, las tomen bajo pena traición y a los que huyan, se les quemen las casas. Que cada vecino tenga arma de fuego o blanca, con especialidad, chuzos. Que el Ayuntamiento fortifique el pueblo, proclamando la Junta Suprema de Extremadura, la Ley Marcial.
En marzo se hizo otra requisa de caballos. Era una guerra religiosa, una Cruzada, en la que los religiosos predicaban a los vecinos animándoles a la defensa y los paisanos se organizaban en guerrillas.
Ya en enero de 1810 encontramos el ejército español del Tajo saliendo de Extremadura por Guadalcanal, disponiéndose que los tiradores y escopeteros, auxiliasen a dicho ejército, y el 12-2-1810 el ejército francés del general Mortier estableció su cuartel general en Llerena, ocupando Guadalcanal. Se mandó dar provisiones para el ejército español, en Guadalcanal y otros pueblos, si bien fue imposible mandar él todo, debido a la ocupación francesa, actuando en el primer semestre muchos guerrilleros, algunos por cuenta propia.
Se había de crear un ejército español en Extremadura compuesto de siete divisiones de paisanos; la quinta división estaría situada en Guadalcanal, donde se pondría el cuartel general, compuesta de los paisanos de los pueblos del partido de Llerena, pero parece ser que no se llevó a cabo. Se decía que todos estarían armados con escopetas del país. Estas divisiones eran para hacer guerrillas y para apoyar a los militares.
En un escrito que se conserva en Extremadura, cuenta un comandante español de aquel tiempo: "La mañana del 10 de abril de 1810 pasamos desde Cazalla a Guadalcanal donde se hallaba el Marqués de Peñaflor con su división. Allí permanecimos hasta las tres de la tarde del día 11 sin novedad, en que se me reunió un teniente que presentó preso al alcalde de Hornachuelos que entregué al general. También llegó a este pueblo, Henestrosa, que enterado que los franceses estaban en Constantina, se retiró por entre sierras. Como a las tres y cuarto, se presentó un fraile que venía corriendo de Alanís diciendo que los enemigos estaban en aquel lugar, y a pocos minutos cuatro dragones franceses se presentaron por las calles de Guadalcanal y de un tiro mataron un cabo de caballería, dieron de palos a Henestrosa y se retiraron con, precipitación. Se tocó a generala, formé mi batallón a la salida del lugar y por más cuchilladas que dí, fue imposible evitar la dispersión de los soldados do la división, que abandonando fusiles y mochilas, corrían como galgos por aquellos montes. Juan Senen de Contreras poniéndose delante, gritó --¡Gallegos, en vosotros tengo la, confianza!—. Formadas las tropas que pudieron reunirse en las alturas inmediatas a la calle que ocupó mi batallón (¿el puerto de Llerena?) se pasó la tarde en temores infundados; las avanzadas que salieron a colocarse en las avenidas del pueblo, creían muchos ser enemigos. El Marqués de Peñaflor se empeñó en persuadirnos que una cordillera de piedra de una sierra de enfrente, eran franceses por lo que convenía marcharse. Visto tal desorden tomé la voz y dije : ¡Sin duda esos enemigos formadas en la sierra tienen pocas ganas c'.e pelear pues desde ayer que aquí llegamos nada nos han dicho!. Se retiraron los generales al pueblo. Al amanecer tocaron diana y salió la división".
En el mes de mayo ya estaban los franceses otra vez en el pueblo y consta que el Marqués de la Romana hizo frente a los mismos dándose la batalla en Cantalgallo (Llerena) el 10 de agosto de 1810 siendo derrotado y saqueada la población.
Ya en abril de 1811 el general Castaño atacó hacia Llerena y los franceses retrocedieron, el día 18 trasponiendo por Guadalcanal. Posteriormente, tras ser derrotados los franceses en La Albuera, el mariscal Soult llegó a Llerena huyendo y se reorganizó allí. Después, en marzo de 1812, el ejército español domina la zona, pero consta la presencia del francés en mayo hasta el 31 de agosto de 1812 en que evacuaron Extremadura definitivamente.
Hubo algunos muertos de la localidad como los soldados José y Juan Spínola, y por parte francesa, según me contaba mi abuela Encarnación Atalaya Sanz, también hubo bajas, ya que los del pueblo mataban a los franceses v los tiraban a los pozos, pues habían cometido muchos desmanes y saqueos, llevándose el ajuar de una antepasada suya.
Lo suministrado a los franceses desde el 12-5-1810 hasta el 31-8-1812 y a las tropas nacionales que venían en los intermedios, es incalculable y sólo de algunos recibos de las tropas enemigas ascienden en dinero a 320,263 reales de vellón; fanegas de trigo, 2686, de cebada, 5030, carne 63816 raciones, vinagre, 7788 raciones, pan 35762 raciones, carnero, 669 raciones, sal, 13816 raciones, y 1000 cabezas de ganado lanar y cabrío que se llevaron la primera vez. La primera entrada francesa compuso más de cien mil reales. Otras 1000 cabezas para Sevilla, además de ganaderías enteras que se llevaron, exigieron los franceses y sacaron en su retirada: 90.000 reales... y 400 herraduras para Sevilla, a que se agrega ser este pueblo punto céntrico y de forzoso tránsito de Extremadura para Andalucía y viceversa, sin que ningún otro le haya ayudado y se deben a vecinos crecidas sumas de dinero y ganado por lo que se hará un reparto entre los vecinos y su aldea de Malcocinado, para recaudar 30.000 reales.
Por otra parte, La Junta Suprema le Extremadura hizo una incautación de la plata de iglesias y conventos como sigue: Guaditoca. Cúpula le las andas de plata de la Virgen. Santa María. Cuatro cálices con peanas, una cruz, una urna del Señor del Jueves Santo. Convento de San Francisco. Un cáliz con patena, dos diademas y un manojo de azucenas de San Antonio. Convento de Santa Clara. Una naveta y dos vinajeras. Hermandad Sacramental. Una cruz y una campana de sagrario. San Benito. Una espada de la Virgen del Mayor Dolor y una diadema de San Isidro. Cofradía de la Soledad. Una taza de pedir. Cofradía de la Cruz. Una taza de pedir, la cruz y el estandarte. Santa Ana. Dos cálices y patenas, unas vinajeras con su plato, y la diadema de Santa Ana. Cofradía del Carmen. Una imagen de la Virgen. Convento del Espíritu Santo. Una naveta de plata. San Sebastián. Un cáliz, una vinajera y su platillo. Cofradía de Jesús. Una lámpara. Convento de la Concepción. Una naveta. Se recogió en total, 198 libras y 18 onzas de plata. (sic)
He hecho una investigación documentada de la Guerra de la Independencia en Guadalcanal y, ciertamente, me hubiese gustado publicar los muchos datos que poseo, cosa imposible, porque absorbería las hojas de esta revista.
Dr. Antonio Gordón Bernabé

Revista de Feria 1988

miércoles, 8 de septiembre de 2010

APELLIDO BONILLA

1er Escudo utilizado en España
LOS BONILLA Y GUADALCANAL


La familia Bonilla tuvo gran trascendencia en la emigración de los llamados “Indianos” que partieron de Guadalcanal al nuevo mundo, muchos fueron los miembros de esta familia que emigraron durante los siglos XV y XVI y algunos de ellos tuvieron parte activa e importante en la formación y colonización de ciudades, formando en varias zonas de la Nueva España la dinastía de este apellido tan extendido en zonas de Perú, Panamá, México, Chile y otras naciones de América central y sur.
Si bien el primer miembro de esta familia que he encontrado, Fernando de Bonilla no era natural de Guadalcanal, pues procedía un pueblo de la provincia de Cuenca (Castilla-La Mancha) llamado Bonilla, recaló en esta villa en el último tercio del siglo XV, parece (aun cuando este dato no lo he podido contrastar) que formaba parte como caballero de las tropas cristianas que conquistaron Alhama de Granada y que fue el preludio de la reconquista de la Ciudad de Granada y rendición del Reino Nazarí de Granada.
Casó con Beatriz González y tuvieron varios hijos, uno de ellos, conocido como Francisco de Guadalcanal, emigró de Guadalcanal hacia el nuevo mundo en 1517 y fue regidor de Panamá.
Posteriormente siguió el mismo destino su sobrino Rodrigo Núñez de Bonilla, que destacó en las guerras de La Española y Tierra Firme con sus armas y la destreza como caballero y fue tesorero de la Real Hacienda de Quito, haciéndose con una importante hacienda y recibiendo del Conquistador Francisco de Pizarro varias Encomiendas y títulos.
Su hijo Rodolfo Núñez de Bonilla reconstruyó la ciudad de Archidona y la denominó Santiago de Guadalcanal.
Otros miembros de esta familia fueron:
Juan de Bonilla, que se casó con Teresa Sánchez y de su matrimonio nacieron varios hijos, dos de ellos, Juan, y Alonso de Bonilla embarcaron en la Nao de Sancho Prieto a tierras del Perú.
Cristóbal de Bonilla que recaló en Nueva España, estableciéndose cerca de la ciudad de México, un biznieto de este último y de igual nombre, Cristóbal de Bonilla nacido en México, ingresó en la Orden de Santiago en 1646 cuando regreso a España después de su periplo americano.
Hijo de otro Cristóbal de Bonilla y de Isabel López, fue Agustín de Bonilla que recalo en Perú en 1592.
Juan Ignacio Sánchez de Bonilla fue caballero de la Orden de Calatrava e hizo varios viajes al Reino de Nueva Galicia y zona sur del Perú, como comisionado real y experto en minas.
Luís de Bonilla Mexía que es estableció en Potosí, envió a España a uno de sus subordinados con un gran lingote de plata para su hermana María de Bonilla y notificándole éste a su vuelta, que su hermana había fallecido y había donado la plata para la ayuda a la construcción en Guadalcanal del convento al que iba destinada la preciada pieza.
Juan de Bonilla Mexía que hizo rápida fortuna como tantos otros peruleros en Lima y volvió a España con una importante fortuna y una corte de esclavos en 1624, dejando por heredera a su sobrina Mariana de la Pava y de Bonilla de Guadalcanal.
Gonzalo de Bonilla y Barba coo-propietario de unas minas en Guanajuato (México) y creador de una importante dinastía de los Bonillas en ese país.

Rama Bonilla en América
Otros muchos Bonillas y Bastidas (mi segundo apellido) que otro día analizaré he encontrado al confeccionar mi árbol genealógico, consultadas la Enciclopedia Espasa de Apellidos Españoles, distintos archivos históricos nacionales y otras fuentes, procedentes de Guadalcanal y ciudades limítrofes de la antigua provincia de León en España, la mayoría de los datos están contrastados, pero otros y lamentablemente por el paso del tiempo y la dificultad de acceder a determinados archivos históricos nacionales, no me han sido posible verificarlos, no obstante, creo que todos estos datos se acercan mucho a la realidad de la procedencia del apellido Bonilla y su implantación en America.


Fuente.- Diego Alfonso Bonilla y Bastida (Profesor de primeros estudios) de Ciudad de Caballococha, Septiembre de 2010, Provincia de Mariscal Ramón Castilla, Departamento de Loreto, Republica de Perú.

viernes, 3 de septiembre de 2010

ISLA DE GUADALCANAL 3/6

Nativos
NUESTRA HISTORIA

Cazadores y recolectores australoides ocuparon las islas Salomón 2500 años, A.C. Desarrollaron una organización social basada en el wantok o sistema de familia extendida, las islas Salomón ya estaban habitadas unos 2.000 años A.C. En Guadalcanal, Gawa, las islas Reef y Santa Ana existen materiales que datan de 1.000 años A.C. Unos 800 años A..C. ya se utilizaban en el archipiélago piezas de alfarería. Exploradas por el español Álvaro Mendaña y de Neira y su lugarteniente Pedro de Ortega Valencia que dío nombre a la isla en 1567 y no serían visitadas de nuevo hasta 200 años después.
En 1885, los alemanes establecieron un protectorado sobre la parte norte del archipiélago y los británicos hicieron lo propio, en 1893, sobre las islas del sur. Entre 1989 y 1990, Alemania cedió al Reino Unido la mayoría de las islas norteñas de las Salomón y las Islas Ontong Java. La totalidad del territorio conocido como Protectorado británico de las Islas Salomón fue puesto bajo la jurisdicción de la Western Pacific High Comission (WPHC) que tenía su sede en Fiji.
Las Islas Salomón fueron invadidas por los japoneses en 1942 pero, tras una batalla especialmente cruenta en Guadalcanal, fueron desalojados por las fuerzas americanas en 1943.
Tras la Segunda Guerra Mundial la capital del protectorado se trasladó de la isla de Tulagi a Honiara. Al mismo tiempo la mayoría de las islas se dotó de Consejos Locales elegidos. Después de la Primera Guerra Mundial el Reino Unido las convirtió en colonia y en 1942 fueron invadidas por Japón. Cuando terminó la Segunda Guerra Mundial el Reino Unido recuperó el archipiélago y lo dividió, dejando la parte oriental –unos 14.000 km2– bajo administración australiana e incorporada a Papúa-Nueva Guinea.
La lucha por la independencia desarrollada por el Partido Progresista del Pueblo (PPP) liderado por Solomon Mamaloni y el Partido Unido de las Islas Salomón (SIUP) culminó en 1976, cuando obtuvieron un régimen de autonomía interna. En 1975 el Reino Unido y el gobierno local acordaron la independencia, proclamada el 7 de julio de 1978.
Mamaloni, elegido primer ministro en 1981 después de que el Parlamento diera un voto de censura a Kenilorea, impulsó la creación de cinco ministerios con responsabilidad en los asuntos regionales.
Tras las elecciones de 1984, Kenilorea lideró un gobierno de coalición y recompuso la relación con Estados Unidos. Renunció en 1986, dando paso a Ezekiel Alebua, que siguió la misma línea.
En 1989 Mamaloni recuperó la mayoría parlamentaria y fue elegido primer ministro.
Francis Billy Hilly lo sustituyó en 1994 pero debió dejar el cargo en octubre, luego de ser censurado por el Parlamento. Mamaloni, nuevamente designado primer ministro, ordenó la tala total de los árboles de la isla de Pavuvu y el traslado de sus habitantes a otras islas.
El primer ministro Bartholomew Ulufa'alu (del Partido Liberal de Islas Salomón) nombrado en 1997, nacionalizó la industria forestal e inició investigaciones sobre el destino de los fondos para el desarrollo manejados por el gabinete anterior.
El Movimiento de Liberación de Guadalcanal (MFG), la mayor isla del archipiélago, exigió, en 1999, compensaciones estatales por el uso de sus tierras, destinadas al cultivo extensivo. Ante la negativa del Estado, el MFG desalojó a los agricultores y cerró sus negocios. Sus ataques iban dirigidos contra los isleños provenientes de Malaita, que controlaban las estructuras de poder en Honiara. Los malaitanos formaron un ejército privado, la Fuerza Águila de Malaita, que se apropió de navíos y armas de la policía.
En junio de 2000 esta milicia, actuando conjuntamente con un grupo parapolicial, secuestró a Ulufa’alu en la capital, Honiara, y lo obligó a renunciar a cambio de su liberación. Tras una votación de emergencia, Mannaseh Sogavare, del Partido Progresista de Islas Salomón para la Unidad Nacional y la Reconciliación, asumió como primer ministro en julio. En octubre, el MFG y la Fuerza Águila de Malaita firmaron un acuerdo de paz cuya aplicación quedó a cargo de Australia y Aotearoa/Nueva Zelandia.
En diciembre de 2001, Allan Kemakeza asumió el cargo de primer ministro. Australia advirtió que no brindaría ayuda económica hasta que se realizaran ciertas reformas políticas (cumplimiento de la ley, restablecimiento del orden), presupuestales y económicas.
En julio de 2003 una intervención armada por parte de la Misión Regional de Asistencia a las Islas Salomón (RAMSI), liderada por Australia, terminó con 4 años de enfrentamientos. Días antes de la operación, Harold Keke, líder del MFG, declaró el alto al fuego y liberó algunos rehenes.
Keke se rindió a la RAMSI en octubre, en Weathercoast, Guadalcanal. Estaba acusado de varios crímenes, entre ellos el asesinato de un ministro de gobierno y un grupo de religiosos anglicanos.
El nombramiento en abril de 2006 del ex ministro de finanzas Snyder Rini como premier produjo una serie de disturbios en que los manifestantes aseguraban que su designación era ilegítima y favorecería a intereses económicos locales y chinos. Ocho días más tarde, Rini renunció y el parlamento eligió a Manasseh Sogavare en su lugar.
En abril de 2007, un tsunami golpeó las islas, dejando un saldo de 18 muertos, decenas de heridos e importantes daños extructurales.
La presidencia la ostenta la Reina Elizabeth II de Inglaterra, representada por Gobernador General señor Frank Kabui y el Jefe de gobiernos es el Primer ministro Derek Sikua. (Sic)

Fuentes.- Jenan Pauitarau
Nduindui (Isla de Guadalcanal)